Por José Calderón y Norma Rojas

Una veintena de los más exigentes catadores mundiales de café está en el Perú para dar puntaje a cada lote de café peruano seleccionado antes de ser puestos a una subasta mundial capaz de vender a 100 dólares el medio kilogramo de café, como sucedió en su anterior versión en México.

Los catadores de la Alliance for Coffe Excellence (ACE), se han agrupado desde ayer en la capital peruana para iniciar la mayor exploración sensorial de los cafés peruanos en el marco de la Taza de excelencia, la subasta mundial de café organizada por la Alliance For Coffee Excellence, de Estados Unidos.

Muchos de ellos tienen en su haber hasta 50 subastas similares en todo el mundo, y son tan perfeccionistas que son capaces de encontrar hasta las últimas capas de sabor en cada grano, así como los defectos mínimos. Por lo tanto, los cafés peruanos que entran a subasta son solamente aquellos que rozan la perfección, y de allí que por ellos se espera precios sin precedentes.

Apenas llegados a Lima, los catadores fueron recibidos por la Cámara Peruana del Café y Cacao, la Junta Nacional del Café, el ministerio de Agricultura,  la Central Café y Cacao del Perú y la Plataforma Nacional del Café en una ceremonia muy vistosa en Miraflores, con brindis de pisco sour y coloridas danzas con trajes de los antiguos keros de Cusco.

Llegaron de  Estados Unidos, Bélgica, Alemania, China, Japón, Corea, Taiwán, Reino Unido, El Salvador y Australia, a convocatoria de Darrin Daniel , director ejecutivo de ACE, así como la fundadora de la Cup of Excellence, Susie Spindler, ambos de Estados Unidos, quienes recibieron un gran aplauso en la bienvenida.

Entre las celebridades del mundo del café no pasó desapercibida la presencia del presidente de la Asociación de Cafés Especiales de Japón,  Shinji Sekine, entre los catadores, quien mostró enormes expectativas en los café peruanos ya que era la primera vez que aterrizaba en Perú.

Actualmente Japón es el tercer importador de café en el mundo luego de Estados Unidos y Alemania, y el cuarto mayor consumidor. Importa café proveniente de más de 40 orígenes.

Pero el récord lo tiene un lote de 728 libras de Costa Rica que fue comprado años atrás por Takamura, tostadores de café de Osaka, Japón por un total de $ 42,952 la libra.

“Desde el 11 al 14 de setiembre, el jurado internacional definirá dentro de los productores finalistas a los clasificados a la subasta internacional y a los flamantes ganadores de la competencia más importante del café en el mundo”, informó a Taza de excelencia-Perú.

Parte del jurado internacional de la Taza de Excelencia serán los peruanos,  Lourdes Córdova, jefa de Control de Calidad de Café y Cacao de la CPC y Jeinner Cubas Vásquez, catador de la Cooperativa Sol & Café, quienes fueron elegidos en representación del Perú.

Ellos conversaron con AgroNegociosPerú acompañados del juez líder del evento, Rony Gámez.

Lourdes Córdova dijo que estar al lado de verdaderas estrellas de la cata mundial es un honor, y haber sido seleccionada entre una treintena de excelentes catadores peruanos es una responsabilidad enorme.

La CPC fue la institución peruana que hace 13 años convocó un concurso de calidad en taza, recordó su gerente general, Eduardo Montaubán.

Lorenzo Castillo, gerente de la Junta Nacional del Café, se sumó a la bienvenida recordando que más de 200 años está el café donde las variedades llegadas de afuera han llegado a niveles de calidad asombrosos.

También estuvo en la bienvenida a los catadores el empresario norteamericano K.C. O’Keefe, considerado el descubridor de los cafés especiales del Perú, quien hizo una de las exportaciones de microlotes de cafés especiales nacionales.

A su lado estaba, Angel Manero, presidente de el Consejo Nacional del Café, y representante del Minagri, quien dio la bienvenida a nombre del gobierno peruano.

Los 35 cafés seleccionados, con más de  86 puntos en taza –en una carrera más o menos como el Gran Prix y Fórmula 1 del café- dan inicio a la temporadas de ferias de café en Perú, que comienza este jueves con la Feria Internacional de Villa Rica y cierra con la Expo Café en octubre,  la gran feria cuya meta es convertir al ciudadano limeño en un gran consumidor de café peruano, lo cual sería un refugio para los caficultores ante las eventuales caídas de precios internacionales.