En el presente año, las ventas de productos agroquímicos en nuestro país ascenderían a 230 millones de dólares, lo que representaría un incremento de 5.0% en comparación a los 220 millones alcanzados el 2015, anunció el director ejecutivo de Cultivida, Rodrigo Santillán
Destacó que este crecimiento responde al mayor uso de dichos productos en el sector agroexportador donde se realiza el mayor empleo de insumos de alta tecnología.
Además proyectó que en el 2017, la venta de estos productos crecería 4.0% respecto a lo alcanzado este año, sin embargo eso dependerá de las lluvias que se registren a fines del 2016 e inicios del próximo año.
“El Perú es un país que tiene una producción importante en secano en la sierra, especialmente de papa. Este incremento de 4.0% puede subir o bajar dependiendo de que tan buen año agrícola se tenga y eso dependerá de las lluvias y otras condiciones climáticas”, sostuvo.
Insecticidas lideran las ventas
Rodrigo Santillán destacó que la costa peruana por sus condiciones climáticas, es un mercado de insecticidas y no de herbicidas porque no hay muchas malas hierbas que controlar (a diferencia de muchos países agrícolas).
Agregó que el uso de los fungicidas es importante porque se cuenta con productos como la uva que son altamente sensibles a hongos, por lo que hay un incremento importante de fungicidas.
“En un orden de prioridad, Perú es un mercado de insecticidas, luego de fungicidas y al final de herbicidas porque no se requiere su uso”, manifestó.
En cuanto a los productos más importantes, destacó que estos son los más novedosos, ya que cuanto más reciente es un producto agroquímico es más eficaz y tiene menores residuos, lo que también representa un menor impacto al medio ambiente.
Nuevas sinergias
El director ejecutivo de Cultivida indicó que la tendencia mundial en el desarrollo de productos de alta tecnología para el agro (o ciencia de los cultivos) será la práctica de una mayor cantidad de estudios para admitir un nuevo producto en el mercado, debido a las exigencias de las sociedades y autoridades.
En ese sentido, destacó que en el futuro existirá mayor necesidad de colaboración entre las empresas que hacen investigación y desarrollo profundo, para poder hacer sinergia y enfrentarla cantidad de dinero que representa hacer los estudios y probar a la sociedad que éstos son inocuos y que tienen el mínimo impacto ambiental.
“Se habla que a nivel mundial que existen unos 7.500 millones de dólares de fondos destinados a la investigación y desarrollo de productos agrarios. Si nosotros invertimos 275 millones para lanzar un producto al mercado, deberíamos estar en la capacidad de manejar entre 20 y 30 productos de alta tecnología”, comentó.